Pongamos lo siguiente bien en claro, por ser más que primordial reiterarlo: Sí hay vestidos que son sexys, pero para que los mismos funcionen, debes ser tú quien les dé vida.
Y no, no nos referimos a tener un cuerpo esbelto, sino personalidad, pulcritud y saber reconocer tus puntos fuertes y saber combatir los débiles. Sintiéndote bien contigo misma, serás la más sexy del lugar.
¿No nos creen?, vean a las damas que portan los vestidos de noche para gorditas y se roban las miradas sin distingo con alguna otra mujer. Todos porque saben mostrar su potencial, mantener su garbo y maximizar su atractivo.
¿Cuáles serían esos vestidos que son sexys?
En principio, hay diseños especiales para “mostrar y seducir”, que son hechos a la medida o por encargo y otros que simplemente puedes adquirir en cualquier tienda y ajustar a lo que esperas sacar de él.
Reiteramos que esos vestidos que son sexys, se encargan de ayudarte en ese trabajo de mostrar tu sex-appeal y todo tu potencial. Mientras más segura estés, el vestido mucho más te ayudará.
Los vestidos que podemos considerar más sexis, son los siguientes:
- Aquellos con strapples o escotes muy largos, donde se dibujan los bordes de cada busto, potenciando cual sea el tamaño de los mismos, como invitando a imaginarlos, sabiéndolos ajenos.
- Los escotes que llegan al busto son sexis.
- Aquellos escotes que no llegan al busto, pero que dejan mostrar su color de piel o hasta las pecas, son sexis en lo recatados.
- Los hombros descubiertos, señal de sensualidad desde la década de los cuarenta, no importa si el vestido es de corte fino con trenzado por detrás del cuello o al ras del busto.
- Dejar la espalda libre es uno de los mayores atributos que los vestidos que son sexys pueden brindar a toda mujer. Recomendamos utilizar los brassiers especiales para ellos o las gomas protectoras adheribles para busto, tanto para su protección y decoro, como para mantener el efecto erguido que es indispensable para la sensualidad.
- Mientras más se enseñen las piernas, mucho más sexis se verán. No importa si es un vestido largo, mediano o corto tipo minifalda, las piernas son el atrayente número uno de las mujeres y símbolo de seguridad, ¡LÚZCALAS!
- Actualmente los vestidos que son sexys, muestran el ombligo o los costados con ese toque de misterio que ofrecen los cortes en forma de rombo y trenzas para ayudar a conectar el vestido y aun así, mantener viva la sensualidad.
- Las transparencias son una manera atrevida y directa de mostrar lo que se tiene. Sólo debes saber dónde usarlos para mantener cierta línea de decoro y aires de juego con lo prohibido.
Cómo ser sensual (8 sencillos pasos)
Para que los vestidos que son sexys te colaboren en tu cruzada, pon de tu parte con sencillez, así:
- Ten presente las fortalezas y debilidades de tu cuerpo, refuerza y maximiza.
- Utiliza los accesorios debidos.
- Practica con el vestido antes de lucirlo, para saber cómo moverte con él y sacarle mejor provecho.
- Muévete con naturalidad, nunca dejes de ser tu misma a la par de mantener prestancia y seguridad. Es más fácil de lo que suena.
- Busca el equilibrio entre los colores, cortes, tipos de tela y accesorios. Mira en las páginas web los modelos y visualiza cómo les podrías adaptar a ti antes de adquirirlos.
- Siempre escucha la opinión de quienes te aprecian; corrige y aumenta, pero bajo tu decisión, no por cumplirle a los demás.
- Descubre cuáles son tus colores más fuertes y los de respaldo. Pero no dejes a un lado los otros para algunas ocasiones en que rompas el molde.
- Disfrútalos, porque los vestidos que son sexys, se disfrutan y se lucen con picardía, para atraer a quien te interesa y dejar boquiabiertos a los demás.